sábado, diciembre 30, 2006

Una nueva Mirada: Víctor Jara Sinfónico

Un gran amigo me invito éste miércoles al evento de Víctor Jara Sinfónico, me varias impresiones.

1) Después de mucho tiempo, digamos 5 ó 10 años, o quizás 15, no había un cambió o mejor dicho no había un enfoque en la visión musical que había de V. Jara, es decir, que no se sabía de su música en otro estilo. Aquí se vió una suerte de esfuerzo entre los interpretes y director, a pesar que los arreglos musicales a veces tendían a lo grotesco si se puede decir así, pero aquello no es de éste post. Una nueva mirada que se le dio a la música Chilena folclórica, se agradece mucho por la valiosa interpretación, que no estaba en lo mediocre pero que no está a la altura del mismo Víctor Jara y su guitarra.


2) Creo que se me cayeron más lágrimas de las que esperaba, recordar situaciones, recordar momentos, se me viene a veces a la cabeza "el viejo comunista", hubo una buena mezcla entre lo emotivo de la música de V.J. y lo potente y nostálgico que tienen las sinfonias, momentos que no deja pasar al tiempo. Puedo decir que es una mezcla valiosa, pero que no alcanza la interpretación del mismo V.J. o de Inti-Illimani, a pesar que los violines o el contrabajo, le daba una aire de cambio, o una especie de complicidad que hay entre la letra y la música propiamente tal, que debe ser esencial en cada canción, sobre todo cuando estamos hablando de V.J. por la calidad de sus palabras y la profundidad que tiene mucha de sus canciones o mejor dicho el sentido de las palabras que tienen.

3) Manuel García como solista me encanta, me emborracha, me vuela, me mata, junto a su banda, me quiebra las piernas, me roba el alma, como interprete de V.J. deja mucho que desear. Vi a un Manuel García que no llegaba a la voz de V.J. a pesar del esfuerzo, una voz que no está a la altura de V.J., una voz que es grave, una voz que parece que sale de las entrañas de la tierra, una voz que parece que viene de ultratumba, pero Manuel García tiene una voz viva, recuerdo mucho a Silvio Rodríguez cuando lo escucho, sin decir el parecido que tienen sus canciones del álbum Pánico, en estilo y en temas de las canciones: Amor. Puedo concluir que Manuel García se esforzó por hacer una voz que no va con él, a pesar de las desafinadas que hubo en algún momento, y la aparente integración en destiempo, y lo inquieto que estaba durante la presentación, a pesar de todo aquello fue una buena presentación, donde quedó a medias el desempeño de Manuel García.

4) Hubo algunos comentarios para destacar: "esto es para los hijos de Lavín" ; " Víctor no se merecía esto". En un acto de ésta indole es verdad que parecía una presentación para gente con alto status: "música clásica", pero es la nueva mirada que hay dde V.J. en la música, creo que ha de ser uno de los hitos más importantes, llevar la música popular a uno de los niveles más altos de la música. Y V.J. se merecía esto, es uno de los mejores musicos que tiene Chile, y llevar su música a otras miradas, que no son grotescas y no son música que suelo clasificar como mierda o música basura, sino llevar a algo má sublime, más sentimental, belleza en el fondo, cabe rescatar la música, sea cual sea el estilo, se llevo la música de V.J. más allá de lo que siempre imagine. Es un homenaje en el más puro estilo de otro tipo de música, diferente a la V.J..

5) Manifiesto, una de las canciones que V.J. compuso mientras veía a las juventudes cambiando, veía que la juventud se iba perdiendo, iba perdiendo sus sueños, no recuerdo el año de la composición, pero me sugiere por los años 70', "...que el canto tiene sentido, cuando palpita en las venas del que morirá cantado...". Esto debe ser el motor de cada música, sentir la pasión, pasión que he visto en pocos que hacen música.


6) Los temas instrumentales, fueron los temas más destacados de la toda la noche, una mezcla perfecta, entre un charango y la quena y los violines con los platillos. Una buena partida.

7) Cabe destacar que no estaba presente Joan Jara, la esposa de V.J., no sé por qué.


8) Creo que también faltaron temas que son recomendable de V.J., sobre todo "Vientos del Pueblo", una canción que tiene un estracto del Poema de Miguel Hernández, que habla de España y sus tierras, mientras está la Guerra Civil, o tal vez antes, no tengo muchos antecedentes sobre el poema.


Manifiesto

Yo no canto por cantar
ni por tener buena voz
canto porque la guitarra
tiene sentido y razon,
tiene corazon de tierra
y alas de palomita,
es como el agua bendita
santigua glorias y penas,
aqui se encajo mi canto
como dijera Violeta
guitarra trabajadora
con olor a primavera.
Que no es guitarra de ricos
ni cosa que se parezca
mi canto es de los andamios
para alcanzar las estrellas,
que el canto tiene sentido
cuando palpita en las venas
del que morira cantando
las verdades verdaderas,
no las lisonjas fugaces
ni las famas extranjeras
sino el canto de una alondra
hasta el fondo de la tierra.

Ahi donde llega todo
y donde todo comienza
canto que ha sido valiente
siempre sera cancion nueva.

martes, diciembre 26, 2006

¿Trascender, Ego, o Exhibicion?

Hace algún tiempo ya, después de la discusión entre generaciones por el post de Lehuede, me quedé pensando algunos días y casi algunas semanas, sobre que era lo que hacía un escritor o un aspirante a ellos cuando escribe y encontre una frase de Fresán: el espejo.

Muchos escriben en la soledad, están allí sentados frente a un papel o una pantalla, con una idea, la cual se deja fluir, la cual se trabaja con el tiempo, la cual se destruye y se vuelve a retormar, recuerdo que Cortázar decía que estamos en busqueda de una cuento perfecto, pero cada vez nos alejamos más de el al escribirlo. La idea con el tiempo, con la busqueda se empieza a destruir sola, me ha pasado que tengo una idea de una cuento, comienzo a escribirla y luego ya no está es otra, entonces llego a creer que los cuentos son reflejos de nuestras obseciones, nuestros sueños, nuestras pesadillas, lo que no queremos muchas veces mostrar, o que sé yo. Existe un combate entre aquella hoja blanca que se va llenando y nuestra idea, la cual se va a alejando poco a poco de lo que era en verdad.

Que es lo que buscamos cuando escribimos, es ése espejo del que habla Fresán, la busqueda de la sensación que nos provocó leer alguna novela, algún poema, o algún cuento, es que queremos revivir esa sensación en los otros, maravillarlos, y que nos digan escribes bien, no lo dejes. Buscamos crecer en la literatura, pero también buscamos que nos alaben, es una cuestión de ego , de decirse así mismo soy bueno, me destaco en esta huea, soy mejor que algunos. Debes en cuando debemos matar nuestro ego, para volver a maravillar, no sé, en la busqueda de la buena literatura, del cuento, de la poesía, de la novela. En todas ellas, hay algo de nosotros, de nuestro alter ego, algo no podemos hacer, algo que está oculto.

Tratamos de maravillar con lo que hacemos, tratamos de quedar en la historia, tratamos de buscar que nos alaben, nos exhibimos cuando podemos, decimos, "yo escribo", para sorprender y para enaltecernos, para seguir escribiendo, hay algo de exhibicionismo en nuestras obras, en todo, y estamos en la busqueda de ser reconocido o quizás nunca lo seamos, pero buscamos eso, es lo que deseamos, aunque no lo digamos eso es lo que nos motiva a veces, exhibirnos para con los demás en la busqueda de ser escritor o que sé yo.

domingo, diciembre 24, 2006

Historia de Diego

La historia de Diego

Ahora, desde aquí extraño la lluvia que caía lentamente en Santiago, a pesar que la lluvia de París fue la que siempre quise tener bajo mi paraguas. Tantos años que he estado aquí trabajando y buscando la verdadera historia de mi familia.

Por la lluvia de París camina Diego con el viejo diario de su abuela Verónica. Camina como si fuese los últimos pasos de su vida, pues ya ha encontrado lo que buscó por años en Europa y en Canadá.

Andrea que llevaba muchos años en Chile, recuerda poco de su hijo que viajo ya hace años viajó a Canadá, para encontrar el diario de su abuela, buscar las historias que nunca contó por temor, vergüenza o por la misma familia para mantenerla siempre unida como lo era. Después de la muerte de Verónica, Andrea le habló del diario de su abuela, le cuenta que se perdió ya hace muchos años cuando la vieja viajó a Europa o cuando estuvo en Toronto. Con ésa historia comienza la búsqueda del diario de Verónica y sus múltiples viajes por el mundo en busca de una historia que se había perdido en una calle, en una casa en un avión, en un tren o en un café.

24 de febrero, 1981.

Andrea se ha levantado para ir nuevamente al trabajo, se siente bien, trabajando en la empresa de seguros, Chile Seguros. No lleva mucho tiempo allí pero ya tenía una amiga, Patricia, a quien conoció en sus estudios de Secretariado.

Andrea tenía 25 años, y nunca imaginó las historias que guardaría las paredes de la Casa que habita con sus hermanos, Santiago, Roberto, Macarena y Aída.

1° de Marzo 1981

Andrea ha llegado con la noticia que ha conocido a alguien, sí, hace tiempo que no estaba con alguien, después de quedar botada, con su vestido de novia visto y enamorada de Marcelo, todo esos años que ha veces e han perdido como hojas quemadas o como las cenizas de un cigarrillo, todo aquello que fue bello para ella y que había olvidado volvía para quedarse en ella, y para engendrar a Diego, que nunca imaginó que tendría un hijo a su edad, pero cuando conoció a Diego en aquella fiesta a la cual la invitó Patricia, que mundos les mostró aquellos ojos claros, sólo ella puede saberlo y sus palabras no tiene forma de expresarlo, sólo en su mente se podrían dar aquellos lugares.

18 de marzo, 1981

Paseando por el parque Forestal, están Andrea y Diego, disfrutando de aquella naturaleza, caminando hacia el museo de Bella Artes, muchas dudas pasan por la mente de Diego, en unos meses más tiene que irse a Concepción, allá debe estar, allá está su familia donde nunca está Andrea ni su futuro hijo.

29 de Abril 1981

Andrea está llorando no sabe que hacer, Diego le ha contado que se tiene que ir en junio a Concepción, mientras Diego en su departamento mira el ocaso, y bebe un café, suele pensar en Andrea, pero su mente está vagando por aquellos bosques, que ahora debía ver, aquel sur del cual salió para ir a estudiar a Santiago, aquella lejanía donde los bosques guardan el silencio de los crímenes, donde el frío llega a calar lo huesos, y la lluvia es tan cotidiana como las personas que caminan bajo ella, y mientras su mente divagaba, Andrea pensaba en lo desgraciada que era con el amor, pero que amor, muchas veces era sólo una relación de amantes, que se juntaban a pasear y follar. La mente de Diego paseaba por su infancia por aquel pueblo casi olvidado, aquel fundo donde muchas veces arriaba animales, nunca supo de lo pasó y pasaría en la Casa tantos años atrás y tantos posteriores.

25 de Febrero, 1982

Después de la explosión, ellos corriendo, todos los compañeros subieron al auto, mientras las balas del fusil silbaban en el aire, una penetró en la pierna de Juan, que cayó, ante eso Aída corrió a ayudarlo, el auto ya se había ido, un golpe de culata recibió, ¡perra comunista!, y mientras el sonidos de las botas de soldados corrían y golpeaban con alevosía a Juan, el gritaba: ¡milicos culiaos!, ver el rostro que sangraba, diciendo basta, déjenme, ver como era golpeado y llevado, separados el uno del otro, golpeados y en el anonimato que son los compañeros caídos, cuantos más había como ellos, que se había perdido que habían muerto por un ideal, un ideal que se hacía lejano, olvidado con la muerte, olvidado con la desesperanza, con la sangre, con el olor de la pólvora, claro, yo no sabía esto, no estaba en mí, no estaba en mis páginas, era olvidado por ellos, era sólo conocido por Verónica que no sabía nada de esto ni de las cosas que habían en la casa

3 de Marzo, 1982

Un batallón llegó a la Casa, Andrea, Verónica y la Abuela estaban allí, Luis seguía en el hospital, los militares entraron saltando las rejas, como si fuese un campo de batalla donde aquellas mujeres todas temerosas veían como avanzaba por el patio, en par, se movían, gritaban, la Casa estaba rodeada y afuera estaba un pequeño Tanque con su cañón dirigido hacia la entrada de la Casa, al invadir su interior, los gritos desesperados, la desesperanza se sumó a la desilusión que tenía Andrea, los recuerdos de Verónica y de la Abuela se remontaron al día del Golpe de Estado, y lo vivido, hija es hora de despedirse hasta aquí llegamos, sobrevivimos a una pero ahora no habrá otra oportunidad, el tiempo ya pasado, se siente el clima intenso, la mirada terrorífica de los soldados, el arma apuntando, ¡salgan todos al patio!, alguien gritó, sí, era uno de ellos, nos quería a todos afuera, quería vernos, quiere saber quienes somos, sí somos un peligro, pero ve a un grupo de mujeres caminar, bajando las gradas lentamente, temiendo el disparo de un fusil, ¡ustedes saquen tres sillas!, ¡rápido!, mientras los otros traían las sillas, nosotras no podíamos vernos, nuestra mirada estaba perdida en nuestros recuerdos en la sombra que era para mí Diego, la enfermedad de Luis, y nosotras paradas, esperando una señal para que nos sentáramos, y la Abuela que lloraba desconsoladamente, se volvía molesta para aquellos uniformados, ¡cállate vieja de mierda!, o quieres morir, pero aquel no sabía que ya todos estábamos muertos, aunque no lo sabíamos, sí muertos, y ahora sólo son parte de una historia oculta olvidada entre mi páginas, y sé que Diego me buscará y que ésta noche cuando ellos se vayan después de haber revisado toda la casa y encontrar un mapa de algún ataque a cierta comisaría, Verónica vendrá a escribir en mi páginas, busquen por todas partes, tiene que haber algo aquí, el cerdo ya habló, ¿dónde están los mapas vieja de mierda? Respóndeme o quieres morir, mientras sacaba su puñal, y lo ponían frente al pecho de Verónica y ella que no sabía nada, que no tenía idea de lo que pasaba, ¡sargento!, que mierda pasa cabo, encontramos unos planos, ¡vieja concha de tu madre! ¡Que! ¡No había nada! ¡Y que mierda son estas hueás!, respóndeme vieja puta comunista, sus ojos cada vez más desorbitados, mientras Andrea piensa el por qué pasó todo esto, que tienen que ver ellos, si nunca han estado metidos en nada, ¡por qué lo hacen! Una bofetada botó a Andrea de la silla, vas a hablar cuando yo te lo diga puta comunista de mierda, ojalá estuviera aquí Diego, o mejor por qué no estoy con él, pensamientos que pasaban fugazmente por la mente de, no sé de donde salieron, gritaba Verónica, déjennos por favor, váyanse, ¿quieres que nos vayamos? ¿Eso quieres?, si nos iremos, traigan las elementos, tres militares cumplieron la orden y pusieron cables sobre la mesa del patio trasero donde estaban sentadas las mujeres con la mirada inquisidora del Sargento, tomen las fotos rápido que estas putas me dan asco, mientas los soldados fotografiaban todos los cables que ellos habían traído, Verónica se resignaba a llorar, a veces pensaba en Luis y agradecía que no estuviera aquí viendo lo que estaba pasando, sí lo agradecía, y lo escribía para mí. Cuando los militares se fueron, y se llevaron las evidencias que comprometían a la Casa, y a la familia, Verónica se sentó un momento y lloró, cuando dejó de llorar dijo, todo lo que pasó aquí se queda entre los que lo vivimos, nadie más se debe enterar, mamá hay que hablar con Aída que paré con sus huevadas y que nos deje de una vez en paz, ¿qué mierda va a pasar ahora?.

5 de Marzo, 1982

La puerta se abre, es Andrea, sus ojos vienen rojos, no ha sabido nada de Diego, ni de Aída, le duele que le hayan cagado la vida, ahora era cesante, la despidieron, éste es un trabajo para gente digna, aquí no aceptamos comunistas, váyase rápido que no quiero tener problemas, esas palabras rondaban por su mente, ahora debía enfocarse a que sería su futuro, que sería de Diego, que sería de la Casa, ¿viste el diario?, no ¿por qué?, aparecimos como la casa donde se planeaba el ataque a una comisaría, hay fotos de la Casa, de las hueas que trajeron los milicos, no sé que haremos ahora, mientras suspiraba Verónica, y no tenemos nada de dinero, mierda, hay que hablar con Roberto cuando llegue, es lo más apropiado para estos momentos, pero le tendremos que decir, tengo peores noticias: me echaron de la pega, ¡qué! Sí, Verónica, nos estamos hundiendo, has sabido algo de Aída, no, nada.

15 de Marzo 1982

Aída mientras camina por su celda en la cárcel de mujeres piensa en Juan, en las torturas que le han hecho, recuerda cuando lo apresaron, cuando lo golpearon hasta dejarlo en el piso y seguir pateándolo, todavía ve su rostro ensangrentado y sus gritos siguen vivos en la celda, pero ella no quiere más, no quiere estar allí, quiere estar con Juan, sacarlo de donde esté, quiere darle su cuerpo, su amor. No duerme desde que la llevaron a la cárcel, nadie sabe donde está, nadie la ha ubicado, ni sus hermanos ni sus compañeros, pero está allí, encerrada en cuatro paredes sin ventana que la libere o le de esperanza de ver algún día el sol.

24 de abril, 1983

El otoño llegó con su dulce caer de las hojas, en una mañana sin más que las persianas cerradas y las habitaciones vacías, y el viejo recuerdo de Diego que aún sigue rondando esta vieja Casa. En algunos fríos rincones de la Casa, Andrea puede ver los recuerdos que pasan caminando, una sombra, una palabra, una canción.

Lleva tres meses de embarazo escondido, más que escondido, el embarazo se ha ocultado solo, dejándola menstruar durante los meses pasados y los que vendrán más tarde. Como podría decir estas cosas ahora deben estar escondidas para cada ser, para cada integrante de la Casa, y por sobre todo para Verónica y para Andrea que no sabe que está embarazada y realiza su vida normal sin penas ni glorias, pero con el recuerdo de Diego que está ausente ahora en su cama.

15 de Mayo, 1983.

Andrea que aún desconoce su embarazo, pues pronto sabrá, más tarde que temprano que su hijo, porque siempre tuvo la certeza de que sería un varón.

Por razones casi místicas como diría más años más tarde Diego, Jaime tuvo que venir a la Casa de Verónica, para suministrarle las dosis de drogas a Luis, que ya estaba en las últimas etapas de su fatal enfermedad.

Jaime que vio un grupo de jóvenes en la Casa, jóvenes que nunca antes había visto. Sus miradas eran como lanzas que atravesaban la carne, buscando la verdad, buscando algo que pudiera ser alguna sospecha sobre algo malo. En ése instante un frío viento atravesó la Casa, caminando por cada muralla. Andrea que no le presentó a ninguno de los que estaban allí sentados, callados como frías gárgolas, llevó rápidamente a Jaime a la habitación de Luis, los dolores que tenía eran cada vez más insoportables. Una vez adentro, Andrea le confesó que las personas que estaban allí no eran precisamente invitados, sino agentes del gobierno, el viento frío que caminaba por las murallas se apoderó de Jaime, y lo congeló, quedando atónito y pálido, sus manos temblaban. ¿Qué hacer ahora? Pasó por la mente de Jaime, su trabajo estaba allí, mientras Luis gritaba por el dolor. Tuvo que realizar su labor médica, pero por él pasaba el terror y el terrible pensamiento de ser detenido por los agentes. No respondía a las preguntas que le hacía Andrea, su trabajo fue realizado maquinalmente y sólo pudo decirle que estaba empeorando la salud de Luis, pero ¡cómo es posible!, se suponía que después de la operación debería mejorar, dijo Andrea, el cáncer está demasiado avanzado. Los ojos de Andrea su volvieron llorosos y rojos, mientras el dolor de Luis se calmaba, pero era sólo una máscara para que la enfermedad abarcará en poco tiempo la totalidad del cuerpo.

Al irse de la Casa, Andrea le dijo, tus piernas están temblando, te cuidado cualquier movimiento en falso es una señal para ellos, mientras los visitantes miraban por la ventana, ¿quién es él?, pregunto el más alto, es el médico de mi padre, está segura de eso, sí, más le vale que sea así. Ya vamos no tenemos nada más que hacer aquí, la veré mañana señorita. El ambiente denso que se podía sentir, se fue junto con los agentes, las lágrimas de Andrea rodaban por su mejilla, dejándose mecer algunas por su nariz.

Al día siguiente volvió Jaime, lleno de preguntas, quería saber lo que pasaba por qué ellos estaban allí, Andrea le explicó la cagada que había quedado después de que Aída y su esposo Juan, se involucraran en las guerrillas contra el dictador, ahora ellos sabían quienes eran, la casa había sido constantemente revisada por agentes del gobierno militar, el constante sufrir de todos, sobre todo de Luis, que no tenía idea alguna de lo que estaba pasando en la casa, no había tiempo para explicárselo, era preferible como dijo una vez Verónica que esto debería quedar entre los que estábamos presentes la tarde en que los militares invadieron la Casa, en esos momentos Aída y Juan no estaban en la casa, era preferible sino ellos sido como los tantos desaparecidos que hay ahora, y que nunca se hablaron en la Casa.

18 de noviembre, 1983

Ha nacido, nació con esos ojos claros que tanto amaba Andrea, nació para conocerme, para buscarme, nació para saber la verdad, Aída que lleva dos meses en libertad, lo cuida teniendo la esperanza de que su hijo, que el hijo que lleva en el vientre sea libre como ellos fueron en la niñez, pero la imagen de Juan tortura y encarcelado en algún lugar de Santiago la atormenta, y se desvela tratando de olvidar las imágenes de los golpes cuidando y viendo al pequeño Diego, sí, Diego debía llamarse es parte de esta historia, es parte de mis páginas y por sobre todo el es mi Némesis, mi final. Debo esperarte aquí donde no me encuentres, jugaremos durante muchos años, yo te veré crecer y tu me veras ya maduro, viejo y olvidado con el tiempo.

16 Octubre, 1990

No lo puedo creer, llegó gritando Aída, mientras Roberto y Santiago la miraban,

¡Juan va a ser indultado!, no sabía que aquello lo alejaría para siempre de ésta Casa, los alejarían para siempre de todos, menos de Diego, que los vería que lo tenía que ver para saber que había pasado cuando él era niño, Joaquín llegó corriendo a los brazos de su madre y tras él viene Andrea y Diego, que ven como Aída da vueltas con su hijo en el aire, sí, Ahora seremos una familia completa Joaquín, conocerás a tu padre, las lágrimas caían en la pequeña cabeza de Joaquín que no sabía por qué lloraba su madre, el también lloraba sin saber nada.

París, Francia, 1999

Los viejos trenes de aquel metro, gastados como los años de Verónica en frías páginas, olvidadas y desteñidas por los viajes, por los diferentes países que recorrió en una maleta, en una cartera, y al sentarse para escuchar las chispas era recordar un viejo tren que pasaba por el sur, como aquel en el que llegó Luis quien sería el esposo de Verónica.

Diego se dirige por la Rue Morgan hacia la casa de Carlos, años que no se veían, los amigos, que alguna vez fueron compañeros de curso, como recordaba Diego aquellas tardes en las que se perdían en el Tabo, en aquellos bosques, viendo y disfrutando de la maravilla en que se convierte la belleza de la naturaleza. Convertidos en hombres se separaron, años en que no se veía, ¿me reconocerá?, se volvía una mar de confusiones

Las calles eran silenciosas que concentraban el ruido de mis botas, los países por lo que viajó Verónica se hacen cada vez más lejanos, cada vez más ajenos, se pierden en el mapa, se vuelven fantasmas, mientras el sonido de las botas se escuchaba, Diego pensaba que su próximo viaje sería hacia Bruselas, allí debía buscar, era el último lugar donde estuvo Verónica en su viaje por Europa.

Bruselas, Bélgica, 2004

Joaquín ve a un hombre extraño sentado en un bar, sin saber que son primos, que son los pequeños que jugaron mientras su familia era detenida, golpeada, y torturada en los años de la dictadura, era Diego, que lo había llamado desde Toronto, tres atrás, un abrazo, le dio y con ello lágrimas de alegría, de recuerdos, de juegos, de infancia caían mientras los gringos bebían sus cervezas, que frío de mierda hace aquí, sí, no he visto en años la luz del sol, recuerdo esas tarde donde el calor de Santiago nos sofocaba y nos bañábamos en la piscinita que teníamos, como olvidarlo, son los recuerdos más presentes que tengo, me he tenido que aferrar a ellos después de que Verónica falleció, pero eso se veía venir, estaba muy mal, la última vez que hable con ella, ya no era ella, su voz era de ultratumba, estaba perdida en sus delirios

París, Rue Saint Jean 2005

Diego que ha llegado en busca de Alicia a París, la vieja amiga de Verónica, toma el metro, mientras va recorriendo las distintas estaciones, éste era el viejo París, el cual quería recorrer junto a Loreto. Carlos que estalla desde un lustro atrás lo recibió en su casa, pero en la mente de Diego habían dos sombras que los molestaban cada vez que salía en búsqueda invisible, blanca, era la sombra que lo perseguía desde que pisó la tierra francesa, ¿llegaré a ver a Loreto en el Arco como alguna vez dijimos que estaríamos?, Carlos que no veía a Loreto desde algunos meses atrás, no pudo responder a la pregunta de Diego, pues no sabía que Loreto ya no estaba en París, sino que está en Barcelona.

Barcelona 2005

Hoy recibí un correo de Carlos, ¿sí?,sí, está muy enfermo, al parecer no le queda mucho tiempo, es posible, imagina que la última vez que estuve en su casa estuvo vomitando sangre varias veces, mientras Diego encendía un cigarrillo Loreto se levantaba y caminaba hacia la cocina en búsqueda de más café, ¿cuándo vas a dejar de fumar?, estás igual que Carlos que fumaba y bebía tanto, cuando tenga un hijo, hace años Verónica me preguntó lo mismo y le respondí igual que a ti amor, ¿no crees que pierdes el tiempo buscando esos viejos diarios de tu abuela?, no lo creo, llevó tres años buscándolos, desde el día en que falleció, fue el día en mi madre me entregó uno de los que había en la Casa, pero sólo son los últimos días en que escribió de su vida, todo fue tan fugaz, sí, es cierto, me costó asumir que ya no estaba en la Casa, y que tendría que viajar a Santiago al funeral, sí lo recuerdo,...¿te acuerdas cuando te conocí? Sí, estábamos en la universidad, llevabas todos esos libros que leías y caíste por estar caminando leyendo uno, fui la única que te ayudó a recoger tus lentes, tal vez fue suerte que lo recogieras tú y no Francisca.

Santiago, La Casa, 2006

Los vientos de París, no se pueden comparar con los de Santiago y menos con aquella brisa de Barcelona o con el frío de Toronto y San Nicolás, pero como me vas a encontrar si me pedieron, tal como los años que llevo encerrados en mis páginas, y sé que estás más cerca cada vez, y que entre más viajes, entre más busques yo más me esconderé de ti, porque éstas historias no son tuyas son mías y de Verónica, sí, de Verónica, no fueron escritas para ti, son mías y no pueden caer en tus manos, y no me importa que me encuentres, sé me encontrarás lo sé y lo tengo más que claro, también sé que me abrirás como cualquier otro que me tuvo en sus manos o como lo haces con cualquier otro libro, pero sabes que no puedes hacer lo mismo conmigo, o que gracia tendría que lo hicieras si toda tu vida está aquí conmigo, sé toda tu vida, la conozco, antes de morir ella, me escribió todo sobre ti, y te conozco sé lo que harás, sé que me quieres y por eso te revuelves en tu cama, porque te duele que no me tengas y te conformas con las caricias de Loreto, que no son tan agradable como la de Nicole, podrás hacer lo que quieras conmigo como lo hiciste con Nicole, y sé que me quieres poseer como lo hiciste con ellas, quieres tenerme en tus manos sucias de ser frustrado, quieres salir de mi juego, del juego que creó Verónica para ti, que creó para la Casa, piensas que ella lo hizo todo, pero no, no fue así, todos eran parte de mí, todos tenían que ser parte mi páginas.

Él estaba más ajeno que nunca a la búsqueda de aquellas páginas perdidas , que le mostraron la verdad de todas las infamias que alguna vez ocurrieron en aquella Casa, desde su nacimiento que era una mentira hasta quienes fueron realmente aquellas personas que lo criaron, ahora que estaba en París, lejos de todos ajenos y siempre con la mirada perdida en algún objeto, trata a Loreto como si ya no fueron más que familia, ya no somos amantes, todo aquel juego se acabó desde que nos encontramos en Barcelona tu allá en la casa de mi primo, todo los viajes no sirvieron más que encontrarme con algo que no deseo, con todas esas verdades que me molestan que juegan en mi mente que me mienten que se esconden tras verdades a medias, no entiendo como nunca me hablaron de nada de lo que pasó, nada nunca fue lo que pensé, nunca estuve con ellos, como quiero que todo aquello, que fueron los viajes, que el tiempo que fue perdido, que la manera de conocer gente que estaba vacía que estaba allí que están acá allá, todos ellos fueron parte de ésta gran mentira, de la obra de teatro que fue mi vida, que buenos actores tuvieron que ser para que nunca viera lo que pasaba.

sábado, diciembre 16, 2006

La Noche de los Perros

No me creerán las cosas que les diré, pues dicen que estoy realmente loco, pero loco de qué me pregunto cada mañana, pero la verdad es que ahora comienzo a contarles lo que ocurrió con todos aquellos, que alguna vez fueron artistas de una generación olvidada.

Siempre me sentaba allí esperado que alguna de esas sombras que pasaban por aquel parque se detuviera y me hablara, pero que estupidez me decía Gustavo cada vez que me encontraba allí fumando o bebiendo algo. Que personajes vi allí, pero yo esperaba que pasara aquella sombra que una vez me llevó a la casa de los perros nocturnos.

I

LA LLUVIA caía intensamente como pequeñas piedras, habíamos salido a juntarnos con los poetas que nos creíamos ser o por lo menos tratábamos de serlo. Nos convocamos como siempre en la casa de Gustavo, la cual era amplia y perfecta para nuestras tertulias, que a veces se basan en hablar de mujeres y algunos poemas y más de alguna vez en beber y fumar. Y es cuando empiezas con la duda, vale pena seguir con ellos o es mejor dejar la poesía a un lado y darle más tiempo al trabajo o quizás al estudio, pero todas las dudas desaparecen cuando estás allí conversando sobre algún poeta desconocido o recitando alguno de tus escritos. Así fue como pasamos muchas semanas y meses en casa de Gustavo, hasta la noche en que aparece uno de los más jóvenes del grupo acompañado de una niña, o más bien una joven, la cual nos deja atónitos a todos, nunca había estado una mujer. Aquella mujer de pelo castaño ondulado, delgada y risueña, era Catalina. Sí, Catalina sabía donde estaba, era más diestra con la poesía que nosotros, parecía que ella venía a sustituir el lugar de Gustavo, razón por la cual comenzó a ser despreciada por éste, además de su homosexualidad. Que hacía tan especial a Catalina, no lo sé.

II

DE VEZ EN CUANDO solía pasear por lo bares en busca de un nuevo compañero con quien hablar, pero sólo encontraba ebrios, pero que importaba yo también lo estaba. Más de alguna vez me encontré con Gustavo y su pareja en los bares céntricos, allí comenzábamos a hablar d algunos poetas muertos, claro, la pareja de Gustavo se ponía algo nervioso, parecía que recién estaba ingresando al mundo homosexual o que yo era una potencial pareja de Gustavo, no lo sé, pero esa misma noche veo a Catalina en un plaza, cercana a Brasil, la veo allí callada y con la mirada perdida en algunos perros que están jugando, su mirada perdida, la mirada que busca la belleza en las cosas más simples, pero ella estaba feliz a momentos viendo como esos perros se muerden como se miran como corren, no quise molestarla con mis palabras de ebrio y de entrometido, y seguí mi camino, pero a las pocas cuadras pude sentir pasos que me seguían de cerca era una sombra que se ocultaba tras los árboles tras los pilares y las entradas de las casas, el miedo que me rodeaba caminar por esas calles ahora era más intenso se volvía una potente máquina que hacía bombear mis sienes de manera que mis pensamientos se volvían caóticos. Al llegar al departamento me creí a salvo, pero la curiosidad del perseguido es mirar por la ventana, y al ver por la ventana la sombra seguía allí mirándome, nuestras miradas se cruzaron y un grupo de perros llegó al edificio, un grupo que salió de las sombras de los árboles. Esa noche no pude dormir por el terror que la sombra siguiese allí.

III

LA MAÑANA que llegué a la casa e Gustavo a contarle lo sucedido hace un par de noches atrás, se rió de mí ignorancia, como puedes reírte de eso, le dije, pero hombre como te va a estar siguiendo una sombra con perros, es absurdo y si fuese verdad, lo único que te perseguiría es tu conciencia de haber bebido toda la noche y de molestar a Francisco, Gustavo de verdad estaba allí lo vi, me seguía, sentía como los perros ladraban, pero como es posible eso hombre nadie sigue a las personas a menos que sea para asaltarlos o algo por el estilo, de verdad esa noche estabas demasiado ebrio, no recuerdas todas las estupideces que le dijiste al pobre de Francisco, desde esa noche que ya no quiere hablar conmigo, esa no te la perdono, sentía que mis palabras eran como hojas que se las llevaba el viento, yo sabía que los perros y las sombras estaban allí, pero Gustavo no creía nada, como comprobar que todo aquello era real.

El jueves caminando por Bellavista, sentí la sombra que estaba allá, en el Bar King, mirándome, podía recordar que esa era la misma mirada intensa que se cruzó aquella noche, estaba cerca podía sentir el sabor oscuro en mi garganta, quemándome, excitándome, vi como se acercaba a mí, no pude moverme, su mirada había paralizado todo mi cuerpo. Poco a poco la sombra fue aclarando su piel hasta convertirse o transformarse en Catalina, que dijo, hola ¿cómo estás?, mi mente que seguía mezclando la imagen obscena que tenía la sombra se embellecía con la luz de la luna o de los faroles de la noche, convirtiendo lo grotesco en lo bello, mi mente no podía dar con esa idea de transformación. Respondí titubeando un “bien ¿y tú?”, se rió, oye nos hemos visto antes no soy un fantasma que te encuentras en una esquina, dijo cariñosamente, ¿por qué no vienes a sentarte con nosotros?, está Gustavo y Matías, gracias, respondí, al llegar a la mesa, Gustavo me preguntó, ¿cómo están las sombras?, me sonrojé, pensé que no diría jamás eso, pensé que nunca se burlara de mis problemas, aún piensas que te están siguiendo, dijo mientras se reía con Matías. Tienes razón esa noche estaba muy ebrio, debe ser alguna alucinación que te dio después de fumar, me senté al lado de Catalina, que estaba bebiendo una cerveza, y fumando, podía oir que su respiración se hacía cada vez más fuerte, cada vez más notoria como si estuviéramos los dos en la misma cama, disfrutando del mismo sexo, bueno muchachos, nosotros nos vamos, tenemos que ir, dijo Gustavo, que se paró súbitamente y se fue seguido de Matías, no tenía idea que Gustavo era homosexual, me reí, desde que lo conozco es así, pero es buena persona, la noche se extendió como una mancha, mientras conversábamos de la vida y otros temas, escuché ladrar a un perro, me asuste, ¿qué te pasa?, pregunto Catalina, no, nada, sabes me siento algo incomodo aquí, podemos a ir mi departamento a beber algo, no está muy lejos de aquí, no hay problema, vamos respondió.

IV

Esa noche fue la vez en que ella me guió a la casa de los perros nocturnos, cruzamos por algunos pasajes oscuros, pude sentir que sombras se nos acercaban hasta que llegamos a una vieja casa, allí, al entrar, todos mis miedos se hicieron reales, las extrañas sombras que me seguían estaban allí mirándome, y veo y puedo sentir como se enredan en mis pies como me cubren con su manto oscuro, con su obscenidad, con su falta de vida y mi cuerpo se paraliza, se queda quieto porque al ver esas sombras que disfrutaban con mi esfuerzo por quitarme de encima a todas esas sombras que van desgarrando la ropa, pero tú, me mirabas y disfrutabas al igual que los hombres y mujeres que estaban en el segundo piso viendo como me trataba de proteger mi sexo, quise correr, era tarde, ya mi cuerpo estaba totalmente cubierto de sombras y el aullido de los perros que se paseaban por la casa hasta que se convierten en hombres y mujeres, que se ríen y que aúllan, y no me dices nada, sólo me miras disfrutas con mi dolor, sabías que esto ocurriría y tu mirada se vuelve más oscura y más escalofriante y sus pensamientos y el de los que me miran se introducen en mí, y siento que una nueva vida se apoderó de todo mi ser, y me levanto como si todo ya hubiera pasado y tomas mi mano y me conduces hasta una habitación en el segundo piso y todo es luz y sombras no hay nada, no hay muebles es un vacío en una habitación donde la ventana no permite el ingreso de la luz lunar, te desnudas y tomas mi sexo y juegas con el, como si fuera tan natural aquella actividad y te vuelves a mirar mi cara que ya no es mi cara sino la de otro, un ser que está en el éxtasis y tus manos persiguen mis muslos, tu mirada turbia choca en mis ojos y te lanzas hacia mi cara, puedo sentir que tus pechos tocan mi sexo y que lentamente me acaricias y me lames, y juegas y persigues algo que no existe, mi cuerpo desnudo se vuelve hacia ti, te empujo, uso mi furia para tomarte por los brazos y poseerte acaricio tus pechos pequeños y te penetro con rabia como si tu fueras la culpable de que mi cuerpo se volviera una sombra, pero eras la culpable, eres tú quien me trajo aquí, no quiero mirar hacia arriba porque sé que ellos nos están mirando están disfrutando de nuestro placer, y sé que si lo miro ellos volverán a poseerme y me harán uno de ellos para siempre, pero sentir tu piel, ése olor que se impregna en la habitación que se confunde con el ladrido de un perro en la calle. Con el eco que se podía percibir, me despertó, la luz del día no entraba pero era día o noche, no importaba, en la casa de los perros nocturnos es siempre oscuridad y cuando ya no hay sombras que miren veo que mi ropa está allá y que Catalina está mirándome disfrutando de mi inocencia pervertida.

martes, diciembre 12, 2006

Adolfo Couve: el pintor- escritor


"Yo como pintor he sido bastante flojo, irregular, tengo facilidades, pero no me he dedicado mucho y no me he jugado como me he jugado en "La Comedia del Arte". No se puede ser dos cosas, es muy difícil porque son distintas actitudes." A.C.

Cuando leí la Comedia del Arte me Maravillé con el escritor-pintor, quedé con la boca abierta al poder ver que su escritura se mezclaba con las descripciones como si fuese una pintura. Como era posible que se integraran la mundo los dioses anacrónicos del Olimpo, jugando con los destinos de las personas, guiando, paseandose por las cal
les de una Cartagena olvidada., una Cartagena que fue conservada en el tiempo porque se olvidaron de ella, ya a nadie le interesaba por eso cuando paso por ahí veo aquellas casas que me recuerdan sus tiempos de glorias, sus tiempos de riqueza, cuando fue el balneario por excelencia, pero el tiempo pasó y quedó allí.

El gusto que sentía Couve por esa singular playa, donde está la tumba de Huidobro, no lo podría describir, es algo que sólo Couve podría decir, si es que sabe porque llegó allí, a un lugar donde el tiempo se detuvo para dejarse ver, pero La Comedia del Arte no es sólo eso, sino que también es el retrato de un pintor sin animos, que los años pasaron por el también, donde sus pinturas no siempre fueron valoradas, éste debe ser el terror de todo artista: no ser reconocido, quedar en el anonimato. Alguna vez escuchue que era mejor que Couve se quedara escribiendo que pintando, no creo que sea tan cierto eso, vi un cuadro, tal vez sólo ese cuadro me recordó la soledad en la que debe estar un escritor o un pintor para crear, para embellecer lo que ve, si bien el cuadro me recordó un que vi en la plaza de armas, donde se ubican todos esos pintores, un cuadro que mostraba la soledad de una persona sentada en una banca de una alameda, un cuadro oscuro, con luz y sombra, un cuadro que me recordó la soledad de Kafka, y pienso que un hombre que siente una soledad por minutos, horas, días, meses e incluso años, podría crear aquel cuadro.

Si bien Couve omitía los detalles de sus cuadros dejando a veces a medio terminar los rostros o cuerpos, no deja lo mismo en La Comedia del Arte, el arquetipo de los pintores, d
e los dioses, de las musas, de que estamos hablando, Couve creó un mundo real dentro de la imaginación, dentro de lo extraño y lo perdido que puede llegar a ser Cartagena, pero no me sucede lo mismo con Cuando pienso en mi falta de Cabeza, la leo, pero a veces llego a sentir lastima, a veces llego a sentir que estractos tan buenos, pero luego caigo nuevamente en lo que es el vacío, a pesar de que es su obra póstuma, pienso que no podía dejar la Comedia del Arte a medias como sus cuadros sino que se debía terminar con la obra póstuma, que no debía tener un conclusión en su primera parte, que debía tener una final, que sucede con los personajes, que se pierden después de que es recogida la cabeza de cera, pero están allí, contados en Cuando pienso en mi falta de cabeza, allí está Marieta que se vuelve loca, alli está Bombillín, Aosta, allí están siendo finalizados como no lo fueron en la Comedia del arte, porque la Comedia del Arte es sólo de Camondo, es de él y para él.

Cuando pienso en mi falta de cabeza, me sorprendió nuevamente, me cayó mal, me
golpeó, me acarició, me besó, se desnudó, cualquier cosa pudo ser, la novela es caótica es que a veces llegué a pensar que aquellas páginas eran inservibles, como algunas que encontré en la Comedia del Arte, pero al terminar las dos novelas, ves que esas páginas están bien, están donde deben estar, ni muy atrás ni muy adelante, solía suceder que me encontraba en páginas que no entendía nada, las discuciones de dioses, la poseción, pero como dije no eran páginas perdidas, eran complementos de una obra de arte que se esboza lentamente.

Pensé que algún día llegaría ponerse esa cabeza, pero no fue necesario, ya estaba coronado como el pintor, ya no importaba encontrarla, ahora era así, no que interesaba si el era otro, pero no podía serlo, pues era Camondo, el pintor, y ahora reconocido por otros y olvidado por otros tantos. Es una novela poderosa, una narrativa demente, que sólo el podía escribir, a veces me recordaba a Donoso, pero no podemos compararlos, porque Couve tiene su propio estilo de narrativa dada por la pintura y por su propio esfuerzo, dejándose llevar por el arte de pintar mediante la escritura.

Sólo en la Comedia del Arte encontraremos a tales personajes, perdidos en el olvido de sus propios, en el pintor con futuro, en la musa inspiradora, la amante, los misterios, el amor por el arte y su desplomar, personajes que se vuelven a repetir en Cuando pienso en mi falta de Cabeza, donde se vuelven más humanos, más encarnados que nuncas, representaciones vivientes de lo que fuimos, somos o seremos. Vuelve a retormar los temas del arte, el amor, el romance, lo venerable, lo real, los místico, la busqueda de una cabeza, que tal vez es la busqueda de sí mismo en un mundo donde el arte fue olvidado, las reuniones familiares, las viejas, el mundo perdido de Cartagena, el mundo que fue olvidado, personajes que fueron olvidados, personajes típicos del mundo.

Sin lugar a dudas Couve me destruyó, me volvió loco con su narrativa, sus cuadros me traen recuerdos de la soledad, bien se dice que dejó una marcada huella en lo que es la narrativa chilena, pues se merece su lugar.


....

lunes, diciembre 11, 2006

El Viaje de Diego

Pequeña Parte de la Novela:

París, Francia, 1999

Los viejos trenes de aquel metro, gastados como los años de Verónica en frías páginas, olvidadas y desteñidas por los viajes, por los diferentes países que recorrió en una maleta, en una cartera, y al sentarse para escuchar las chispas era recordar un viejo tren que pasaba por el sur, como aquel en el que llegó Luis quien sería el esposo de Verónica.

Diego se dirige por la Rue Morgan hacia la casa de Carlos, años que no se veían, los amigos, que alguna vez fueron compañeros de curso, como recordaba Diego aquellas tardes en las que se perdían en el Tabo, en aquellos bosques, viendo y disfrutando de la maravilla en que se convierte la belleza de la naturaleza. Convertidos en hombres se separaron, años en que no se veía, ¿me reconocerá?, se volvía una mar de confusiones

Las calles eran silenciosas que concentraban el ruido de mis botas, los países por lo que viajó Verónica se hacen cada vez más lejanos, cada vez más ajenos, se pierden en el mapa, se vuelven fantasmas, mientras el sonido de las botas se escuchaba, Diego pensaba que su próximo viaje sería hacia Bruselas, allí debía buscar, era el último lugar donde estuvo Verónica en su viaje por Europa.

París, Rue Saint Jean 2005

Diego que ha llegado en busca de Alicia a París, la vieja amiga de Verónica, toma el metro, mientras va recorriendo las distintas estaciones, éste era el viejo París, el cual quería recorrer junto a Loreto. Carlos que estalla desde un lustro atrás lo recibió en su casa, pero en la mente de Diego habían dos sombras que los molestaban cada vez que salía en búsqueda invisible, blanca, era la sombra que lo perseguía desde que pisó la tierra francesa, ¿llegaré a ver a Loreto en el Arco como alguna vez dijimos que estaríamos?, Carlos que no veía a Loreto desde algunos meses atrás, no pudo responder a la pregunta de Diego, pues no sabía que Loreto ya no estaba en París, sino que está en Barcelona.

Barcelona 2005

Hoy recibí un correo de Carlos, ¿sí?,sí, está muy enfermo, al parecer no le queda mucho tiempo, es posible, imagina que la última vez que estuve en su casa estuvo vomitando sangre varias veces, mientras Diego encendía un cigarrillo Loreto se levantaba y caminaba hacia la cocina en búsqueda de más café, ¿cuándo vas a dejar de fumar?, estás igual que Carlos, cuando tenga un hijo le dije, hace años Verónica me preguntó lo mismo y le respondí lo mismo que a ti amor, ¿no crees que pierdes el tiempo buscando esos viejos diarios de tu abuela?, no lo creo, llevó tres años buscándolos, desde el día en que falleció, fue el día en mi madre me entregó uno de los que había en la Casa, pero sólo son los últimos días en que escribió de su vida, todo fue tan fugaz, sí, es cierto, me costó asumir que ya no estaba en la Casa, y que tendría que viajar a Santiago al funeral, sí lo recuerdo,...¿te acuerdas cuando te conocí? Sí, estábamos en la universidad, llevabas todos esos libros que leías y caíste por estar caminando leyendo uno, fui la única que te ayudó a recoger tus lentes, tal vez fue suerte que lo recogieras tú y no Francisca.

Santiago, La Casa, 2006

Los vientos de París, no se pueden comparar con los de Santiago y menos con aquella brisa de Barcelona o con el frío de Toronto y San Nicolás, pero como me vas a encontrar si me pedieron, tal como los años que llevo encerrados en mis páginas, y sé que estás más cerca cada vez, y que entre más viajes, entre más busques yo más me esconderé de ti, porque éstas historias no son tuyas son mías y de Verónica, sí, de Verónica, no fueron escritas para ti, son mías y no pueden caer en tus manos, y no me importa que me encuentres, sé me encontrarás lo sé y lo tengo más que claro, también sé que me abrirás como cualquier otro que me tuvo en sus manos o como lo haces con cualquier otro libro, pero sabes que no puedes hacer lo mismo conmigo, o que gracia tendría que lo hicieras si toda tu vida está aquí conmigo, sé toda tu vida, la conozco, antes de morir ella, me escribió todo sobre ti, y te conozco sé lo que harás, sé que me quieres y por eso te revuelves en tu cama, porque te duele que no me tengas y te conformas con las caricias de Loreto, que no son tan agradable como la de Nicole, podrás hacer lo que quieras conmigo como lo hiciste con Nicole, y sé que me quieres poseer como lo hiciste con ellas, quieres tenerme en tus manos sucias de ser frustrado, quieres salir de mi juego, del juego que creó Verónica para ti, que creó para la Casa, piensas que ella lo hizo todo, pero no, no fue así, todos eran parte de mí, todos tenían que ser parte mi páginas.

Él estaba más ajeno que nunca a la búsqueda de aquellas páginas perdidas , que le mostraron la verdad de todas las infamias que alguna vez ocurrieron en aquella Casa, desde su nacimiento que era una mentira hasta quienes fueron realmente aquellas personas que lo criaron, ahora que estaba en París, lejos de todos ajenos y siempre con la mirada perdida en algún objeto, trata a Loreto como si ya no fueron más que familia, ya no somos amantes, todo aquel juego se acabó desde que nos encontramos en Barcelona tu allá en la casa de mi primo, todo los viajes no sirvieron más que encontrarme con algo que no deseo, con todas esas verdades que me molestan que juegan en mi mente que me mienten que se esconden tras verdades a medias, no entiendo como nunca me hablaron de nada de lo que pasó, nada nunca fue lo que pensé, nunca estuve con ellos, como quiero que todo aquello, que fueron los viajes, que el tiempo que fue perdido, que la manera de conocer gente que estaba vacía que estaba allí que están acá allá, todos ellos fueron parte de ésta gran mentira, de la obra de teatro que fue mi vida, que buenos actores tuvieron que ser para que nunca viera lo que pasaba.

miércoles, diciembre 06, 2006

¿El arte es para todos?

De verdad muchos creen que el arte es para todos, pero realmente es así, pensando las palabras que decía cierto pintor que no conozco en un comercial, "el arte es para todos, es para ti", sin embargo, el arte se reduce a unos pocos, a unos pocos que son afortunados en buscar pinturas, libros, música, porque de verdad entre la variedad que existen de músicos, no de todos podemos decir que tienen una obra magna, allí entramos en la problemática de ¿qué es arte? y ¿para quién está dirigido?. El mismo Borges, con su escritura culta, procesada, compleja y llena de laberintos, nos lleva a un grupo selecto de lectores, no es igual el caso de Fugguet, tal vez sea porque no me gusta, simple y llanamente, pero no encuentro mucho que decir de tal escritor nacional.

Dados todos los casos, me encuentro en la necesidad de hablar de Kafka, que maravillosa manera de escribir, conversaba el otro díad e la complejidad de sus cuentos y de sus novelas, allí te das cuenta que es necesario crear una cultura literaria y en artes plasticas, la verdad es complicado crear ése ambiente, hemos priorizado otras cosas, las fiestas, etc. Nos estamos volviendo marionetas vulgares, sin conocimiento, bueno, dirán que soy ratón de biblioteca, pero es lo que me gusta, y creo que hay muchos como yo, que se pasan hablando de vez en cuando de algún libro o algún autor. Quizas no estemos transformando en cucacharas de otros, o simplemente estamos en un tiempo de guerra contra la literatura, recuerdo el boom latinoamericano y su explosión, muchos creyeron que era una jugada de los editores, pero no fue un grupo de escritores, todos en sus propias casa escribiendo, nunca fue un movimiento de escritores, doy gracias a todos los grandes escritores de esta tierra tan llena de literatura que queda por explotar, debe ser Latinoamerica uno de los lugares donde más se pueden escribir novelas, cuentos, dada la singularidad y la historia que tenemos.


La complejidad de crear ése ambiente cultural se vuelve una neblina a la hora de escribir, o de leer alguna buena novela, pues, nos encontramos con grupos de novelas que se vuelven tediosas y que no son agradables, es cierto que todos tenemos diferentes gustos, pero debe haber alguna cultural literaria común a todos, que si queremos hablar de tal escritor o tal pintor, todos podamos decir algo, comentar entre todos, y que no se vuelva una conversación de grupos selectos, pero ¿es posible aquello?. Ahora que salgo del colegi, espero no encontrarme con vacíos culturales, yo también los tengo, también necesité de alguien o algo que me volviera algo más culto, no leí un clásico ni nada por el estilo sino que "la casa de los espíritus".

Ahora que hay tiempo para escribir y para leer, hay que disfrutarlo a concho, ahora hay prioridades:

1.- Consolidar el Adane http://adaneistas.blogspot.com
2.- Terminar la novela
3.- Terminar La noche de los perros (serie de cuentos)

Dentro de ellos puedo escribir toda la poesía que quiera, porque por el momento no he tenido la inspiración necesaria para escribir algunos poemas, la novela se roba todo mis pensamientos, todos los juegos que son posibles en escribir, a veces me da miedo ser escritor, pero luego me miro y digo " esto es lo que realmente te mueve, te gusta, te excita, te realiza", los exitos u otras cosas no son necesarias, quizás nunca sea un escritor famoso y que más da, sólo tiempo dirá eso y crear todo las palabras que uno va imaginando, va escribiendo son el único futuro que tenemos, pero ¿qué es necesario en un escritor? no tengo ni la mínima idea, lo único que sé es que hay que lanzarse sin mirar atrás, sin pensar más que en la creación de belleza.

Ahora que estoy escribiendo sobre autores latinoamericanos, siento que el Adane se acerca, se viene a quebrar la razón de todos, lo obsceno de lo bello, lo grotesco lo común y corriente, lo cotidíano para demoler todo lo que estuvo antes de nosotros, espero no ser un grupo de jóvenes que con ideas, pero soy uno, uno que quiere un revolución en la literatura, veo que los jóvenes escriben que se divierten con sus juegos de letras, que se emocionan cuando ven que sus textos son valorados, el Adane no viene para hacernos famosos, o quizás lo seamos, el Adane viene a abrirles las puertas de la literatura, para que en próximo años haya un movimiento grande un grupo de tal año o que sé yo qué, me alegro de querer ser escritor, soy joven y muchos dirán que estoy hablando bobadas, pero estas bobadas se están volviendo una realidad cada vez más cercana más tangible, más nuestra.

martes, diciembre 05, 2006

José Donoso y Cola de la Lagartija




"La natural herencia de cualquiera que sea capaz de vida espiritual es un indómito bosque donde el lobo aúlla y el obsceno pájaro de la noche hablo." Henry James

Cuando estás leyendo el obsceno pájaro de la noche, estás en el mundo donde el caos se vuelve una realidad tan despierta, donde te encuentras con personajes que están vivos que son poderosos, que manipulan y son manipulados. Vas leyendo una historia donde los intereses se van encontrando se van transformando en pequeñas sombras de la vida, se incorporan en ti, te vuelven uno más de los que están allí presenciando la vida, el milagro que no es milagro, se vuelve una poderosa arma, una arma que sabes que viene por ti.

Hace ya 2 años leí "Coronación", que puedo decir, me gustó a pesar de ser una novela tan lenta, pero era unna novela que me atraía, me daba que pensar, me mostraba el mundo, sin embargo, leyendo Cuentos de Donoso, me siento más cercano a él, ha sido una viaje de un extranjero en busca de de sí mismo, y al comenzar el Obsceno pajaro de la noche, quedé sin palabras, quedé anonadado, como era posible que hubiese tal perversidad en sus personajes, tanta cosa grotesca, pero es tan atrayente sus páginas, que no te sueltan, de ber ser porque está tan trabaja cada página, imaginar todos los años que demoró en escribirla, y poder sacar de un capítulo otra novela, da mucho que hablar del trabajo de Donoso.

El domingo estaba leyendo, y me encontré con un artículo, en el Mercurio, sobre Donoso, pues lo saqué y no lo leí hasta la noche. El artículo trata sobre una novela jamás publicada por el escritor chileno, La cola de la lagartija, el libro narra la desesperación de un pintor que, después de un éxito fugaz, se recluye en un pueblo medieval en España, Dors. El libro se viene pronto por lo que leí, no recuerdo muy bien los detalles de la publicación, pero fue encontrado en la universidad de Princeton, creo que hubiese sido un crimen a nuestra cultura literaria si hubiese estado en la universidad de Chile, donde fueron quemados ejemplares de libros en manifestación por los presos mapuches, por el mismo tema conversaba el otro día, de que allí habían primeras ediciones, libros inéditos, y creo que a muchos de los que escriben, se les ha pérdido alguna vez, algún bosquejo de algun cuento, o que sé yo, pero el punto es como es posible aquel ataque.

De todos modos lo importante que el autor sigue tan vigente después de la muerte, y es un placer leer esas páginas llenas de imaginación, de personajes grotescos, y obscenidades, de oscuridad, situaciones que pervierten, en fin sólo puedo decir dos palabras para describir sus cuentos y novelas, José Donoso.

"Quebrar el ciclo necesario que va, desde la mañana y la conciencia de haber despertado en el infierno de este piso que tal como yo quiero está aislado de todo yy no puede wuceder nada, hasta caer al transcurrri del día...Yo, claro, jamás tuve ese miedo y amor casi religioso al atardecer que los jóvenes de Dors tenían", La Cola de la Lagartija*




*Estracto toma de El Mercurio, Domingo 3 de Dic,Artes y Letras, página 15.

lunes, diciembre 04, 2006

Adane



Creo que el Adane lleva así como 5 meses de creación, y de verdad, éste grupo o movimiento tan pequeño me ha hecho pensar en tantas cosas, desde que debemos renovar hasta embellecer lo más obsceno que hay en la vida. Muchas veces me hn preguntado que es el Adane y de verdad ni yo se bien que es, sólo sé que es algo que viene desde adentro, que trata de volver al mundo más humano, mostrar un arte que sea humano, tratando a cada personaje con cuidado, que sean tan hombres como él, el que los imaginó.

El Adane no llega para mofarse de las cosas que hay, tal vez la critica por medio de las cosas absurdas que muestra. Cuando estoy dedicado a mi novela, pienso en los juegos que puede haber en una narración, y luego pienso en la poesía que puedo construir en una página, que luego alguien leerá. Pero el Adane es más que escribir o que dibujar o recitar, es ver el mundo, tal cual es, y adaptado a tu forma, ahora que estoy realizando una antología de cuentos sobre artistas y veo que Felipe realiza su cuento y su poesía de forma potente y cada vez más humana. Llegar a lo humano, llegar a lo que somos realmente, seres de piel, seres que sienten, en el fondo ser "persona humana".

Ahora que estoy más decidido que nunca ha seguir escribiendo, como tantos otros que he conocido durante ésta corta vida, me doy cuenta que la calidad es lo importante, tampoco quiero ser un Borges, porque trato de ser yo mismo, ser Rubén. He tratado de crear personajes tan propios como Jaime o el próximo Diego que aparecerá en la novela, ven como adelanto algunos personajes de la historia, pues bien, esta tarea que nos queda por terminar y que jamás terminará e escribir, escribir para hacer belleza, escribir para maravillar, escribir para emocionar, para crear historia tan reales y tan ficticias que la verdad nunca será la verdad, que mostrar al mundo los mundos que nos rodean no son sólo imagenes de nuestra emnte, sino que podamos compartir con quienes leen y disfrutan de ello.

Como que éste año ha sido uno de los más trabajados en la literatura, crear un poemario, crear el Adane junto a Felipe, la novela, la antología que se viene, y la revista. De verdad ahora se nos viene el Adane en su totalidad, se vienen los cuentos de Felipe y sus poemas, de Gonzalo no sé que esperar, pero si creo que realizará un buen trabajo y Sebastián con u poesía y su narrativa deseo que nos delumbre con una creación maravillosa.

jueves, noviembre 23, 2006

Diarios de Verórica



Tal vez la manera más simple de empezar una novela es, nunca empezar. Cada historia que tenga que sea un cuento o un poema o simple prosa, pero una novela es cuestiòn de unión de creación que no está por allí botada.
Después de todo éste tiempo realizando Diarios de Verónica, que aún no puedo terminar, no he tenido ni tiempo para ver los blogs amigos, pero no hay nada como escribir y poder juntar todas aquellas historias que te rondan en la mente. no creo que Diarios de Verónica pueda ganarme esta batalla literaria, no es posible, después de todo soy yo quien la escribe, o quién sabe quién más la está escribiendo.

Crear el mundo de Verónica y Diego, bueno, creo que Diego sabe más, por la experiencia que es crear una novela. Saber que ellos mismo desspués de leer todas esas hojas, tengan su propio pensamiento, vivos.

AL viajar a Isla Negra, nos encontramos un escritor Local, él escribió una novela sobre el ambiente cultural en que se transformó Isla Negra. Lo más simpatico de todo esto fue que nos confesara que tenía una Industria Literaria, habitaciones con maquinas de escribir, no pude dejar de imaginar una indsutria llena de chinos o que sé yo. Después de conversar con él, decidí más que nunca seguir con Los diarios de Veronica, así que ahora con tiempo voy a seguir fechas por fechas, juegos por juegos, historia por historia; sentí que serían historia similares historias casi reales pero más bien fantasticas, donde quiero llamar al juego de la literatura, dejar que el lector sea un propio narrador, donde no existan los límites para leer.

No puedo dejar de pensar que Mariano Salas, así se llama, se atreviera a publicar independientemente, eso me dio un tanto de valor, y no está demás decir que nos invitó a escribir a su casa, para seguir escribiendo y no dejarse llevar por la falta de reconocimiento. Después de todo hemos escrito para nosotros, tal vez para poder descargar todo nuestros sentimiento o tal vez para que podamos decir "escribo". No, pero eso sería simple, sería escribir por escribir, ahora, yo me pregunto ¿por qué escribo ésta novela?...La verdad es que ésta novela breve me molesta en el alma dese hace mucho tiempo, he hablado con Diego sobre ello y con Sebastián también, quiero esa novela fuera de mí, para que otros la disfruten, para que sufran, para que jueguen, para que se rian, para que lloren o que sé yo lo que provoqué.

Se que con un cuento algunos sientieron miedo, a eso voy yo, a eso quiero ir, no dejar de maravillar al lector, que está allí viendo páginas en las cuales una historia se dibuja.

miércoles, agosto 23, 2006

El jinete en la oscuridad













El jinete en la oscuridad

“He escuchado del silencio,
el secreto de árboles ocultos.
Un jinete en la oscuridad,
el grito de una escopeta,
quisiera mecerme en aquel
caballo de madera,
que en mi mente
era una bestia infernal.
Ahora sientes el viento
del invierno que siempre
ha de llegar a mis brazos.
Las miradas se cruzan,
el olor a pólvora se mezcla
con la complicidad,
un jinete en la oscuridad
ha caído desde un juguete.
Aún puedo escuchar
el rezo hereje en mi oído,
"deseas confesar"...
mi pecado fue jugar
en un caballo de madera"

Tomado de “Desde el Absoluto al Fuego”, poemario dedicado a la Maga.

Éste martes supe que fui el primer lugar en poesía en mi Colegio, fue genial, realmente no podría explicar la alegría que sentí en ése momento, salvo cuando corrí y me deslice por el pasillo.

Pido disculpas por no haber subido antes algún comentario, pero no hay tiempo, más bien he estado leyendo libros.

Muchas veces me he preguntado como podremos realizar éste proyecto que tenemos con Felipe, pensando como unir a un grupo que quisiera seguir una misma línea de escritura, simplemente escribiendo me respondí. Toda ésta idea me da ganas de estar allí para ver como resulta, si será un bodrio, perdida de tiempo o si será un buen “movimiento” que quiso hacer algo diferente. Algo alocados, pero queremos escribir, eso debe ser lo importante, sin embargo, no podemos dejar de lado la calidad de la escritura que deseo. Ya estoy empezando a escribir un manifiesto, o si se le puede llamar así. Tal vez seamos sólo un movimiento dentro de un colegio pequeño y desconocido, y que con el tiempo se llegue a olvidar (recuerdo a los real viceralistas), pero nos atrevimos a hacer algo, no nos quedamos de pie, esperando a otros. Siempre he pensado que en una década o dos se generará una gran generación de cuentistas, novelistas y poetas en Chile, no me digan que soy un idealista, un romántico, porque esas cosas ya las sé.

Diego me ha dicho que he evolucionado, creo en sus palabras. Hemos hablado de muchas cosas, sobre todo de literatura. Nuestra experiencia con Roberto Bolaños, que nos ha enviciado. Ahora estoy escribiendo cuento, dándole más calidad de humana a cada personaje como me lo han aconsejado, tratando de insinuar más que mostrar todo ante el lector. Luego de aquello empezaré la novela que siempre he querido escribir, llena de realidades, de fantasía, misterio, magia y de humanidad, sobre todo humanidad.

Por el momento no tengo más planes literarios que, terminar “el pintor de las mujeres azules” y otros cuentos más que tengo en mente para hacer una antología propia y empezar la novela, formar el grupo literario.

“El pintor de las mujeres Azules”

“Desperté ese días cerca las cuatro de las mañana, el teléfono, me levante a regaña dientes. Contestó ella, dijo, necesitaba escuchar tu voz, colgó. Me vestí con lo primero que encontré sobre la cama, y calenté agua para preparara café instantáneo. Las palabras que me dijo Angélica quedaron rodando en mi cabeza. Luego empecé a preguntarme, porque no le dije donde estaba y un montón de preguntas. Bebí el café instantáneo mientras encendía un cigarrillo. Salí apenas bebí el café. Tome mi sombrero y abrigo más una bufanda. Caminé sin sentido alguno, tome calles y otras así. La noche o más bien madrugada, pero helada. En una plaza me encontró el amanecer. El Sol me hizo recordar cierto cuadro que pinté cuando era aún joven en Cartagena. Encendí otro cigarrillo el humo llegó a mi casa como una densa neblina, era el terminal y ésta era la última vez que viajé solo hacia Santiago. Estaba nublado, casi llovía. Así conocí a Angélica, comenzó a llover.”

lunes, agosto 07, 2006

Nicanor Parra y su hombre imaginario.


''El Hombre Imaginario''

El hombre imaginario
vive en una mansión imaginaria
rodeada de árboles imaginarios
a la orilla de un río imaginario

De los muros que son imaginarios
penden antiguos cuadros imaginarios
irreparables grietas imaginarias
que representan hechos imaginarios
ocurridos en mundos imaginarios
en lugares y tiempos imaginarios

Todas las tardes tardes imaginarias
sube las escaleras imaginarias
y se asoma al balcón imaginario
a mirar el paisaje imaginario
que consiste en un valle imaginario
circundado de cerros imaginarios

Sombras imaginarias
vienen por el camino imaginario
entonando canciones imaginarias
a la muerte del sol imaginario
Y en las noches de luna imaginaria
sueña con la mujer imaginaria
que le brindó su amor imaginario
vuelve a sentir ese mismo dolor
ese mismo placer imaginario
y vuelve a palpitar
el corazón del hombre imaginario"

Aun cuando es estoy escribiendo aquí sigo leyendo e imaginando al hombre imaginario, valga la redundancia. Hace unos días conversé con un amigo sobre éste poema, no recuerdo muy bien lo hablado. Pero ése día estábamos paseando por la Quinta, viendo el lago o viendo los árboles que allí se pueden apreciar, grandes pinos- me encantan los pino- y otros árboles que no reconocí, no soy experto en materia de árboles ni maderera. Conversamos sobre lo que era Roberto Bolaño, más bien yo le hablaba de él, también hablamos de otros libros, entre ellos de de Rayuela, de la casa de los espíritus y de como nos había marcado-fue uno de mi primer libro que leí con ferocidad, sin embargo, yo sigo pensando que es una copia de Cien años de soledad. Ese día también recordamos nuestro viaje al Tabo, mientras yo escribía un cuento y leía obras de Cortázar, y hablábamos de cambiar el mundo.


Lo interesante fue conversar sobre aquel hombre imaginario y sobre Nicanor Parra. Allí le postulé una idea que tenía en mente hace varios días: Crean un movimiento de vanguardia chileno. Allí mismo pensábamos que debía tener ése movimiento, ése pequeño grupo de amantes de la escritura o de la lectura. Dijimos algo de la crítica social, pensábamos en conjunto que nuestra sociedad está mal (yo di un ejemplo que sólo mi receptor sabe cual es) y que nos tenía mal a nosotros también. Hablamos también que tal vez debía tener absurdos de las cosas cotidianas. En esas semanas pensaba mucho en Roberto Bolaño y en su escritura y en su pérdida par la literatura tanto para la chilena como para la internacional. Claro, dirán son unos jóvenes que no tienen idea de literatura y de que es crear un movimiento literario, pero yo les digo, que sólo se necesitan las ganas de escribir, las de leer, las de querer algo más, las de tener un sueño y las de crear algo nuevo. No quiero ser romántico, pero sí quiero ser un soñador. Tal vez algún día, no hoy ni mañana, pero sí en un tiempo más adelante, Chile pueda tener un grupo literario que quiera destruir todas las barreras que alguna vez fueron quebradas por otros que nos antecedieron u otros que vendrán luego. Ojalá yo esté vivo aún y pueda estar con ellos. Estos días he pensado mucho en Diego Zúñiga y sus escritos, deseo encontrarme algún día con él, y que me diga, estás loco. Pero sé que el también tiene ése sueño y quién sabe, él sea uno de los mejores exponentes.

*Utilicé a Nicanor Parra para una introducción.